Endodoncia en Vitoria
Cuando un paciente llega a nuestra clínica dental con el nervio de un diente afectado a causa de una caries profunda o de un traumatismo, es necesario llevar a cabo una endodoncia para salvar la pieza dental.
Conservar el diente será siempre una prioridad para nosotros. Sin embargo, en aquellos casos graves en los que la infección haya llegado a afectar a la raíz o el hueso puede resultar necesario extraer la pieza dental, para evitar que el daño se extienda.
El primer paso antes de llevar a cabo una endodoncia, es anestesiar la zona que vamos a tratar, para que el paciente no sienta ningún tipo de molestia.
Durante el tratamiento, se extrae el nervio del diente afectado (pulpa) para, posteriormente, rellenar y sellar el conducto pulpar con un material biocompatible.
En piezas dentales en las que la corona haya sido destruida en alto grado y sea necesaria una artificial, podemos recurrir al perno muñón o a las incrustaciones dentales.
Perno muñón e incrustraciones dentales
El perno muñón es un elemento metálico, a modo de tornillo, que se introducen en los conductos radiculares previamente endodonciados. La porción que sobresale del resto radicular permite la elaboración sobre ella de la restauración dental, reforzando la pieza tratada.
La incrustación dental permite la reconstrucción intra o extra coronal que se hace para reemplazar una porción de diente perdida. Las incrustaciones dentales se utilizan especialmente en dientes posteriores que presentan caries moderadas o fracturas y en dientes endodonciados, siempre y cuando el daño no sea tan extenso como para requerir la colocación de una corona.
Tratamiento de conductos
Es un tratamiento relacionado directamente con la endodoncia. Consiste en remover el tejido nervioso muerto o deteriorado (pulpa) para evitar la extracción del diente.
Para llevarlo a cabo, se realliza una perforación en la pieza dental para retirar el nervio, y posteriormente se limpia la cavidad, para terminar procediendo a su rellenado.
¿Cómo prevenir una endodoncia?
La medida principal para evitar una endodoncia es la prevención. Una de las principales causas por las que un paciente debe someterse a una endodoncia es porque el diente está afectado por una caries profunda de gran tiempo de evolución.
Cuidando la higiene y detectando y tratando la caries a tiempo, podremos evitar endodonciar la pieza dental en un gran número de casos.