La alveolitis ¿Qué es? ¿Cómo se trata? ¿Cómo prevenirla?
Toda extracción dental, por sencilla que parezca, conlleva riesgos. Por ello, hoy desde el blog de nuestra clínica dental en Vitoria, te explicamos qué es la alveolitis, por qué se produce y sobre todo, cómo prevenirla.
Tras una exodoncia, lo normal es que se forme un coágulo de sangre a modo de tapón. Un tapón que protegerá el espacio del diente extraído. Sin embargo, si esto no ocurre, esta área puede quedar expuesta a futuras infecciones.
Este es el contexto ideal para que se produzca la afección de la que hablamos hoy; la alveolitis.
Contenido
¿Qué es la alveolitis?
La alveolitis suele ser la principal complicación tras una extracción dental. Esta infección aparece cuando el coágulo de sangre que debía formarse tras dicha extracción, no llega a formarse o, por algún motivo, es expulsado.
Este coágulo funciona como una capa que protege el hueso y prepara la base para el crecimiento de uno nuevo. Por eso, cuando no disponemos de él, el hueco queda expuesto a bacterias y demás infecciones.
Principales síntomas de la alveolitis
- Dolor intenso después de la extracción.
- Pérdida total o parcial del coágulo sanguíneo en el lugar de la pieza extraída.
- Hueso visible en la cavidad.
- Dolor que puede llegar a extenderse a oídos, ojos, cuello o sien, además de la parte de la cara donde se extrajo la pieza.
- Mal aliento.
- Un sabor fuerte y desagradable en la boca.
Causas: ¿Qué lo produce?
No se sabe con exactitud por qué se produce. Sin embargo, hay algunos factores a tener en cuenta que aumentan las posibilidades.
Entre ellos se encuentran:
- La edad del paciente: A mayor edad más probabilidades de padecerla.
- El tabaco: Fumar retrasa la cicatrización y contamina la herida.
- Una mala higiene bucal.
- Tener caries o enfermedades periodontales.
- Anticonceptivos o pacientes que están ovulando: Debido al mayor número de estrógenos se altera el proceso de cicatrización.
- Padecer una infección: Una contaminación bacteriana del alveolo o una posible complicación en la extracción dental, también puede aumentar el riesgo de padecer alveolitis.
¿Cómo se trata la alveolitis?
Si crees que puedes estar sufriendo alveolitis, lo primero que debes hacer es ponerte en contacto con tu dentista. Él limpiará en profundidad la zona alveolar para proteger la herida.
De igual manera, tu odontólogo podrá realizar un legrado para poder formar un nuevo coágulo. Tu dentista calmará el dolor con analgésicos, antiinflamatorios (para la hinchazón) o antibióticos orales (para la infección) según sea el caso.
Aunque la alveolitis no es una enfermedad grave, sí es dolorosa, por lo que la prevención es muy importante. Su duración puede oscilar entre los 10 y 15 días.
¿Cómo prevenirla?
Si bien es cierto que solo el 5% de los pacientes que se realizan una extracción dental llega a sufrir alveolitis, es importante seguir ciertas indicaciones.
Desde Amalthea, tu clínica dental de confianza, te las recordamos:
- No enjuagarse o escupir las 24 horas después de tu operación para no sufrir el riesgo de pérdida del coágulo o una mala cicatrización.
- No tocar la herida.
- Informar a tu dentista sobre cualquier medicación qué estés tomando.
- Evita alimentos duros o pegajosos que puedan dejar restos de comida en tu boca.
Especialistas en odontología en Vitoria
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